La minería ilegal es uno de los denominados "combustibles del conflicto armado y de la violencia" en Colombia.
La cantidad y variedad de riquezas minerales en nuestro país, han resultado un imán para la formación de grupos armados para proteger intereses en esta tarea de extracción, así como la presencia de los actores armados ilegales tradicionales, como paramilitares y guerrilla para disputar el control de esta actividad.